© Adrián Miyares Olavarría
La prevención de los EAs en las instituciones sanitarias, es un tema de absoluta actualidad enmarcado en el contexto de la Seguridad Clínica. Hacer del medio sanitario un entorno más seguro, es el principal objetivo de multitud de organizaciones internacionales, y sus estrategias y planes de actuación así lo demuestran. Las caídas de los pacientes durante su hospitalización, se perfilan como uno de los EAs que más daño causan al individuo de forma directa, y más secuelas y discapacidades producen. Las intervenciones para disminuir la incidencia de caídas son múltiples, pero todas ellas precisan de una adecuada evaluación del riesgo de caer. Existen multitud de instrumentos para evaluar este EA (escala de Morse, evaluación del riesgo de caídas de Heindrich, escala STRATIFY…) que ayudan a identificar a los pacientes en riesgo, para instaurar intervenciones preventivas desde una perspectiva multifactorial e interdisciplinaria, que aborde componentes no sólo del comportamiento, sino también del entorno. En definitiva, nos encontramos ante un problema de salud importante, pero sin lugar a dudas, las cifras reales de la incidencia de caídas en nuestros hospitales es un dato que todavía está por descubrir, pues la notificación conocida de estos accidentes es sólo la punta del iceberg.
