Estrategias para el tratamiento del dolor posquirúrgico en niños

Abstract

Actualmente, las intervenciones quirúrgicas en pacientes pediátricos son diarias, lo que implica una situación de vulnerabilidad para el menor, siendo su complicación potencial el dolor, que se define como una sensación desagradable asociada al daño, que además puede tener efectos negativos sobre el desarrollo del niño. Aproximadamente el 85% de los niños sufre dolor posquirúrgico mal controlado, por lo que es esencial un buen abordaje; comenzando por una correcta valoración del dolor, utilizando escalas validadas ajustadas según edad y desarrollo cognitivo. Tras la obtención de un valor, se utilizarán aquellas estrategias adecuadas para el control del dolor, mediante un esquema multimodal, que incluye medidas farmacológicas, a través de la combinación de fármacos, junto con medidas no farmacológicas que incluyen estrategias cognitivas y físicas. El papel de la enfermera es fundamental en el manejo del dolor posquirúrgico, comenzando por la fase preanestésica en la que se aplican estrategias no farmacológicas que frenen la ansiedad del niño y de sus padres. Tras la cirugía, aplicará las medidas farmacológicas y no farmacológicas ajustadas a la valoración que mejor se adapten al niño, además, de fomentar el papel de los padres en el cuidado de sus hijos

Currently, surgical interventions in pediatric patients are daily, which implies a situation of vulnerability for the minor, its potential complication being pain. Pain is defined as an unpleasant sensation associated with damage, which can also produce negative effects on the child’s development. Approximately 85% of children suffer poorly controlled postoperative pain, so, a good approach is essential; starting with a correct assessment, using validated scales adjusted according to age and cognitive development. After obtaining a value, those strategies suitable for pain control will be used to control it, through a multimodal scheme, which includes pharmacological measures, through the combination of drugs, together with non-pharmacological measures that include cognitive and physical strategies. The role of the nurse is fundamental in the management of post-surgical pain, beginning with the pre-anaesthetic phase in which non-pharmacological strategies are applied to decrease the anxiety of the child and their parents. After surgery, the nurses will apply the pharmacological and non-pharmacological measures adjusted to the assessment that best suit the child, in addition to promoting the role of parents in the care of their children