dc.description.abstract | La etapa escolar y la adolescencia son consideradas periodos relevantes a nivel físico, psíquico y social, en los que el estado nutricional juega un papel muy importante. Además, se consolidan los patrones alimentarios y estilos de vida que van a repercutir posteriormente en la salud del adulto. Actualmente, los patrones dietéticos están en transición hacia unos hábitos alejados de lo considerado saludable y donde prevalece el consumo excesivo de hidratos de carbono simples, proteínas y grasas saturadas. Todo ello refleja un distanciamiento de la dieta mediterránea, considerada como un factor protector para enfermedades no transmisibles. El objetivo de este trabajo es analizar el patrón dietético de niños y adolescentes que acuden a una consulta de nutrición hospitalaria, mediante el recuerdo dietético de 24 horas, un cuestionario de frecuencia de consumo y el cuestionario Kidmed de adecuación a la dieta mediterránea. Los resultados obtenidos reflejan una ingesta energética inferior a las recomendaciones, con un consumo de macronutrientes desequilibrado. La ingesta de los distintos alimentos de consumo diario y semanal se aproximó a las cifras consideradas adecuadas, excepto las frutas. Se observa, por otro lado, un consumo excesivo de productos industriales. La mediana de Kidmed alcanzó valores de 6 (2). Tras el análisis de los resultados, se sugiere la necesidad de mejorar el patrón de alimentación entre los escolares y adolescentes mediante programas y actuaciones que impliquen a organizaciones, centros escolares, sanitarios y las familias. | es_ES |