Terapias dirigidas. La revolución de los Aptámeros

Abstract

RESUMEN: Los aptámeros constituyen un nuevo grupo de productos farmacéuticos que surgen como una alternativa a los anticuerpos, ya que presentan una afinidad y especificidad similares. Asimismo, evitan algunos de los problemas asociados a éstos, como la elevada complejidad de su producción, su gran coste, su posible inmunogenicidad o su alta inestabilidad, y aportan otras ventajas, como una mejor detección de las moléculas de bajo peso molecular, la posibilidad de ser usados como terapias dirigidas contra un amplio rango de dianas de diversa naturaleza, incluyendo las toxinas, y que son relativamente fáciles de modificar químicamente. Los aptámeros pueden tener múltiples aplicaciones, pudiendo utilizarse en ámbitos tan distintos como la industria o la medicina, por ejemplo como herramientas terapéuticas, como vehículos de otras moléculas o incluso como elementos de detección integrados en biosensores. A pesar de todo esto, los aptámeros apenas están presentes actualmente en la práctica clínica, habiendo sido aprobado para su comercialización sólo uno de ellos, el Pegaptanib.

ABSTRACT: Aptamers constitute a new group of pharmaceutical products that emerge as an alternative to antibodies, since they have a similar affinity and specificity. In addition, they avoid some of the problems associated with antibodies, such as the high complexity of their production, their high costs, their potential immunogenicity or their high instability, and provide other advantages, such as a better detection of low molecular weight molecules, the possibility of being used as targeted therapies against a wide range of objectives of diverse nature, including toxins, and that they are relatively easy to modify chemically. Aptamers can have multiple applications, as they can be used in fields as different as industry or medicine, for example as therapeutic tools, as vehicles of other molecules or even as detection elements integrated in biosensors. Despite all of this, Aptamers are barely present in the clinical practice nowadays, with only one of them, Pegaptanib, being approved for commercialization.