@misc{10902/14189, year = {2018}, month = {6}, url = {http://hdl.handle.net/10902/14189}, abstract = {En condiciones normales, en nuestro tracto intestinal existen más de mil tipos de microorganismos que en conjunto componen la microbiota intestinal humana. En adultos ésta puede alcanzar un peso de hasta casi 2 kg, y es tan única y diferente como puede ser su huella dactilar. La relación de simbiosis que mantenemos con estos microorganismos está vinculada a nuestra salud, ya que perturbaciones en la microbiota, como descensos en la densidad y diversidad de bacterias intestinales, están asociados con ciertas enfermedades y viceversa. La composición del microbioma gastrointestinal puede estar condicionada por numerosos factores como el uso de antibióticos, el tipo de parto, algunas enfermedades crónicas como la obesidad, y la dieta. Ésta última es considerada uno de los factores más relevantes desde el nacimiento, partiendo del modo de alimentación inicial con lactancia materna o leche de fórmula, pasando por la introducción de los alimentos, hasta llegar al estilo de dieta en el adulto. Como recomendaciones principales para mantener una microbiota intestinal sana se han encontrado: llevar una dieta equilibrada, la lactancia materna frente a la artificial, el parto vaginal y la disminución del consumo de antibióticos.}, title = {La microbiota intestinal humana y sus modificadores : el poder de la dieta}, author = {Sainz Cantero, Bárbara}, }